Lorenzo Fernández, escritor y periodista, presentó su nuevo libro 99 lugares donde pasar miedo en el segundo acto del último día de congresos en la Facultad de Comunicación de la UAB. En un discurso introductorio animó a los estudiantes presentes: “Hay que mantener la ilusión para tirar adelante”. Los tiempos son duros, pero Fernández afirma que no debe darse nada por perdido.
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| Lorenzo Fernández junto a José Mª Perceval, quién lo presentó. FOTO: Abel Roncero |
El escritor reconoce ser adicto a las travesías gracias a sus numerosos desplazamientos: “Llegas a casa, dejas las maletas y ya estás pensando en el siguiente viaje”. Sus motivos son el hecho de poder aprender profesionalmente y llenarse como persona: “Viajar para poder contar tu experiencia, eso es lo mejor”. Hace falta fortaleza física pero sobretodo mental para afrontar los duros viajes que han llevado a Lorenzo Fernández por lugares inhóspitos, peligrosos y aterradores.
Dos referentes marcan la trayectoria de Lorenzo Fernández:
· Francisco de
Orellana: nació hace 500 años y a los
16 años quiere ir a América y se pone a los mandos de un barco de Francisco de
Pizarro. Cuando llega se encuentra en medio de una batalla en la que pierde un
ojo. En poco tiempo se convirtió en un gobernante de una población de la
América Latina. Fue el primer hombre al navegar el Amazonas, al que le puso
nombre después de ver una tribu de mujeres guerreras, enfrentarse a ellas y
salir huyendo.
· Percy H. Fawcett: Criado y educado en el régimen castrense más estricto.
Era capaz de beber de la historia más ortodoxa y admitir que detrás de todo
mito hay siempre una historia. Hace un gran recorrido por las selvas amazónicas
y cuenta sus relatos de tribus perdidas y de las que nadie sabe su existencia.
Va a crónica casi diaria/semanal hasta que finalmente desaparece.
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| A la salida del Aula Magna se vendieron ejemplares del último libro de Lorenzo Fernández. FOTO: Abel Roncero |
El escritor también tuvo tiempo para justificar su obra y
su trabajo de campo previo: “¿Por qué pasar miedo? Porque controlado es una
sensación apetecible y agradable. Como periodistas nuestra palabra no vale nada
si no le damos el soporte del dato, el nombre y el apellido”. Finalmente,
Fernández ilustró ejemplos de su libro con sus historias tétricas: el santuario
de los endemoniados, la isla de las muñecas, The Winchester Mystery House, Bajo
el subsuelo de Edimburgo, Stanley Hotel, etc.
¡Pero aquí no acaba todo! Abel Roncero consiguió declaraciones del momento más aterrador en la vida de... ¡Santiago Tejedor! ¿Qué dijo el carismático profesor?
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